RETO GRÜNENTHAL PREVENCIÓN DEL DOLOR CRÓNICO

Premio

1.000 €

Explicación del reto

El Reto Grünenthal Prevención del Dolor Crónico está dirigido a encontrar soluciones digitales para evitar o mitigar la cronificación del dolor. Podrán presentarse todo tipo de propuestas innovadoras que puedan desarrollarse en los campos de la salud digital­—aplicaciones, videojuegos, dispositivos, sistemas basados en Big Data e Inteligencia Artificial, etc.— que cumplan el objetivo del reto.

 

Los proyectos no requieren tener el desarrollo tecnológico iniciado o completado para concursar, bastará con plasmar la idea en formato vídeo para ser preseleccionados por el jurado, debiendo hacer su presentación de forma presencial el día del Hackathon.

 

Se valorará su grado de innovación (no debe existir en el mercado), la evidencia científica en la que se basa, el desarrollo tecnológico previsto y su viabilidad general justificada por un plan de negocio en formato Canvas.

 

Este Reto está dotado con 1.000€ y el desarrollo potencial de una aplicación.

 

Las nuevas tecnologías pueden aliviar y prevenir el dolor crónico

 

Las nuevas tecnologías aplicadas al diagnóstico y tratamiento del dolor pueden reducir las posibilidades de que se convierta en crónico y aliviar su intensidad, tal como recogen diversos estudios con programas y aplicaciones de seguimiento y educación del paciente. Estas se basan en la identificación temprana de pacientes de riesgo y de factores desencadenantes del dolor para el diagnóstico precoz y la prevención de crisis, la medición continuada de variables físicas y psicológicas, la mejora de la autonomía personal, la individualización del tratamiento para ajustar su intensidad y administración al perfil y las necesidades del paciente, la formación en el conocimiento de su patología y del control del dolor y la comunicación telemática con el profesional sanitario, entre otras posibilidades.

 

En este sentido, uno de los mayores metaanálisis realizados sobre tecnología de la información aplicada a la salud (eSalud), publicado en Pain Medicine, concluye que “dada la disponibilidad generalizada y el bajo costo para los pacientes, los médicos que tratan a pacientes con dolor crónico podrían considerar el uso de intervenciones de eSalud y mHealth –salud móvil- como parte de una estrategia multidisciplinaria de tratamiento del dolor”. En los ensayos analizados se comprobó que “tanto las intervenciones de eSalud como las de salud móvil tuvieron un efecto significativo sobre la intensidad del dolor en el seguimiento a corto y medio plazo. De manera similar, se observó un efecto significativo pero pequeño para la depresión en el seguimiento a corto y medio plazo y la autoeficacia en el seguimiento a corto plazo”. También se apreció una mejora en la percepción del dolor.

 

Otros trabajos también reflejan estos beneficios. Así, una investigación publicada en la revista BioMed Trastornos endocrinos centrales mostró que las aplicaciones desarrolladas para su uso en pacientes con dolor permiten lograr una mayor adherencia de los enfermos a las recomendaciones del médico, facilitar el seguimiento y una adecuada monitorización de las terapias.

 

Los asistentes de voz, apoyados por la Inteligencia Artificial, también pueden ayudar a aliviar el dolor, según el consenso alcanzado entre la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) y la Sociedad Española del dolor (SED) con motivo del Hackathon Salud de 2021. En dicha edición resultó ganador el equipo PainKey, compuesto por miembros del Consorcio Hospital General Universitario Valencia y la Universidad Politécnica de Valencia, que propusieron una aplicación móvil basada en la voz para detectar el dolor crónico en Urgencias antes del triaje. Para ello, incorpora análisis de datos y técnicas de inteligencia artificial e infiere el nivel de dolor a partir del timbre de voz del paciente. Además, añade a todas estas características la posibilidad de ser integrada en la historia clínica electrónica.

 

El análisis de grandes cantidades de datos es una de las vías que permite a los médicos ajustar el tratamiento del dolor. Un grupo cooperativo catalán dirigido por el Hospital del Mar, en Barcelona, publicó un estudio en la revista Pain en el que muestra un modelo de riesgo prequirúrgico relacionado con el riesgo de sufrir dolor postquirúrguico.

 

Este tipo de modelos también puede ayudar a ajustar el tratamiento y mejorar el dolor, según un estudio publicado en Journal of Neural Engineering en el que se demostró que un modelo 3D del paciente ayudaba a elegir mejor los parámetros de estimulación en la espina dorsal.

 

Otro ejemplo de tecnologías usadas por profesionales sanitarios para tratar el dolor y prevenir su intensidad es la conocida como Painometer V2, certificada y diseñada para monitorizar a los pacientes con dolor. Impulsada desde el Centro de Investigación en Evaluación y Medida de la Conducta (CRAMC), del Departamento de Psicología, en la Universidad Rovira i Virgili, esta aplicación móvil está validada científicamente para medir y registrar la intensidad del dolor a lo largo del tiempo y permite activar protocolos de actuación que eviten su cronicidad.